Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces", símbolo del sentido común, el coraje y la determinación, sabio ermitaño, leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la

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Intento ser como el tejón de "El viento entre los sauces",simbolo del sentido común,el coraje y la determinación, sabio ermitaño,leal con sus amigos, amante del buen tiempo y de los rayos del sol, y busco el equilibrio entre lo que yace bajo la tierra y lo que descansa sobre ella.

20/4/15

¡AY,SOL HERIDO DE MUERTE!

En el lejano horizonte,
todo el cielo y mar en ascuas,
 se ha herido el sol de la tarde
con el cristal de las aguas,
y una andanada de sombras
llenó de luto la dársena.

La voz del mar es tan triste,
tan triste como mi alma.
Noche de sombras y olas,
noche sin Dios en la playa.
El mar entre los peñascos
es una fiera enjaulada
que golpea los barrotes
ansiosa de carne humana.

¡Ay, sol herido de muerte
con el cristal de las aguas!.

Jesús Cancio en su libro,"Bronces de mi costa"

La fosa común más grande del mundo

Desde 1988 hasta 2013, más de 19.000 personas han muerto tratando de cruzar el mar Mediterráneo hacia las costas de Europa, aunque la cifra podría ser mucho mayor.

18/4/15

RÍO CANAL DE LAS TEJERAS

Aviso: antes de echar a andar ponéos un calzado adecuado si no queréis terminar con los pies calados, hay que cruzar varias veces el río y tened mucho cuidado de no resbalar, que las piedras están llenas de musgo y verdín.
La canal de Las Tejeras está tallada por el agua, y ahora es la mejor época para verla, el agua corre  por todas partes formando saltos, riegas y cascadas de gran belleza, cuando llegue el verano estará seca pero aún así seguirá siendo bonito subir por ella desde Somahoz  hasta el Monte Brazo, apenas cinco kilómetros con un desnivel acumulado de poco más de 400 metros.
Y bueno, ya habéis visto y cruzado las primeras cascadas.
¿Que os parece el lugar hasta aquí? Bonito,¿eh?
Pues se acabó el recreo, hemos venido para algo más que pasear, nos hemos propuesto limpiar la senda de las marcas que dejan "otros" por el monte, para no cargar con la culpa los que no tenemos ni queremos que se nos compare a todos por igual...de cerdos quiero decir.
Esto ya no es tan "bonito", y no es que no me guste el rosa, pero hombreeee...
...que ni el musgo deja crecer, y lo que ha costado borrarlo a base de tirar de cepillo de alambre.
Han pintado flechas en las piedras hasta donde se ve claramente el camino, vamos, que parece que ha pasado por aquí una tribu de indios.
Un haya que parece un candelabro de mil brazos, precioso, ¿a que si?.
No me jo..., ¿que nos han "pintao" hasta los avellanos...
...y el cuidado que hemos tenido para borrarlo, más que cepillar lo hemos acariciado.
Y no veaís los que hay pintados, además de los avellanos, los robles, hayas, acebos...
A ver cómo pasamos.
Pues nada, tirando de hacha y serrucho y sudandonos hasta los pelos, aunque yo en la cabeza pocos tengo.
Así ha quedado el camino, ¿a que da gusto verlo tan despejado?
Y lo que me gustan estos puentes, no puedo evitar sacarles fotos y enseñarlos.
En el refugio hemos tomado las viandas y hemos descansado, ha sido una bonita mañana de domingo, los que fueron a misa dirán: "Que gente más rara hay en este mundo"
Y no les falta razón,  locos, que no  hay más que locos.

8/4/15

LOS PUEBLOS DE LOS PICOS.

Tudes,Liebana (Cantabria)
Sotres,(Asturias)
Cordiñanes,Valdeón (León)
Santa María de Valdeón,(León)
Tresviso,(Cantabria)
"Cantabria Infinita", "Asturias Paraíso Natural", "Castilla y León es vida".
 Tres "Slogans", tres comunidades que comparten los tres macizos de los Picos de Europa y alguno de sus numerosos y bellos pueblos ha sido mi lugar de peregrinación esta Semana Santa.

Y en cualquiera de ellos podría haber sucedido la historia que aquí os cuento, sacada del libro "Los últimos pastores de Los Picos de Europa" de Ernesto Bustio Crespo y José Luis casado Soto.

Por lo menos desde la primera mitad del siglo XIX, tanto Tresviso como  Bejes y Sotres contaban con  escuela de primarias letras, las cuales, ya en el siglo XX, estuvieron atendidas por un maestro y una maestra. Por lo menos durante esa última centuria, tanto niños como niñas acudían entre los seis y los catorce años a la modesta escuela. En la villa tresvisana, antes de la guerra, la maestra les llevaba todos los días durante el recreo a visitar el Santísimo y por las tardes al catecismo; los primeros viernes a comulgar; "todas sabíamos el Rosario de punta a punta". Se tenía memoria de que por lo menos de entre los vecinos de Tresviso tres llegaron a sacerdotes, no obstante, el primer bachiller elemental civil se graduó en el Instituto de Potes a finales del siglo XX.
  Probablemente a consecuencia de la desaparición del señorío, parece que hacia mediados del siglo XIX Tresviso estuvo más tiempo del debido sin cura. Algunos escritores y poetas llaniscos recogieron la historia, ciertamente llamativa, de alguien que ocupó la parroquia haciéndose pasar por sacerdote. Según los escritos, un tal José Manuel de Cué y de la Borbolla, zapatero remendón en Pimiango, de 61 años de edad, enterado de la oportunidad que el caso ofrecía, se personó en la villa arriscada entre peñas, allá por el año 1842, diciendo que era el nuevo párroco. El haber sido monaguillo en su primera juventud y el dominio de la jerga gremial llamada "mansolea", que mezclaba con algún que otro latinajo, le permitieron engañar a los rústicos vecinos de la villa y proporcionarles la cura de almas, a cambio de disfrutar durante algún tiempo de posición desahogada, sedentaria y respetable.
  Pasados seis meses, según la leyenda, fue reconocido por un mendigo, según el poema, por el sacristán, situación que tuvo la virtud de dar con sus huesos en la cárcel por el mismo tiempo que había ejercido el ministerio sacerdotal. Si no fuera cierta la historia, desde luego resulta verosímil y, en todo caso, pone de manifiesto tanto la credulidad y sencillez que las gentes de la costa suponían a los habitantes del interior de los Picos, como la fama de su aislamiento secular. Tresviso volvió a estar sin párroco desde la guerra hasta 1956 y , desde diez años más tarde, tampoco cuenta con cura residente.

Mucha culpa de esta entrada la tiene "Cabopá" y a ella se la dedico, y si queréis saber por qué, entrad en esta ventana que se ve el Mediterraneo.
Un besico,Carmencica.
No dejemos morir a los blogs.